Agencias
Este miércoles el Comité de Estudio Republicano (RSC, por sus siglas en inglés) ha publicado su visión de la estrategia de seguridad nacional para EE.UU. que propone designar a Rusia como un país patrocinador de terrorismo, alegando su apoyo a movimientos y países que EEUU considera enemigos, como Irán, Hezbolá, los talibanes y otros. No obstante que los talibanes son enemigos de Rusia y le hicieron la guerra cuando ese país estuvo presente en Afganistán en la década de los años 80 del siglo pasado. En esa época los talibanes fueron entrenados y financiados por EEUU e incluso Ronald Reagan recibió a una delegación en el Salón Oval de la Casa Blanca.
El documento de 120 páginas también aconseja sancionar los proyectos de petróleo y gas de Rusia, así como cualesquiera compañías involucradas en esos negocios, a aquellos que compren la deuda del país, a los "jefes de la propaganda" rusa y la Sociedad para las Comunicaciones Interbancarias y Financieras Mundiales (SWIFT) hasta que expulse a Rusia.
Rusia rechaza por "grosera" la sugerencia
La portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, ha
declarado este jueves en una rueda de prensa que los llamamientos
procedentes desde EE.UU. de calificar a Rusia como un país patrocinador
de terrorismo son "una auténtica grosería".
"Nos acostumbramos desde hace mucho a las declaraciones de ese tipo de representantes de la clase política estadounidense que, a mi modo de ver, tratan de aumentar su propia notoriedad utilizando la rusofobia", ha afirmado Zajárova, al señalar que el Gobierno ruso dejó de reaccionar a estas cosas de manera seria y se limita a calificarlas "de manera clara e inequívoca".
La diplomática rusa ha indicado que ese tipo de políticas en relación a Moscú no suponen una novedad. "Una vez más se hacen algunas analogías, se proclaman consignas sobre cómo golpear más fuerte al sector energético y financiero, cómo extender las sanciones personales", ha agregado.
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